26 de junio de 2012

Los días pasan y la muerte se acerca...


Qué te cuento mi amor que te pudiera interesar, si a veces ni a mí me interesa conmigo platicar.
Llego a la casa y en tu mirada se refleja el cansancio de la aburrida vida casera.
¿Nos habremos condenado por coger antes del matrimonio? Y a caso eso interesa?
Nuestra vista se pierde en la fauce del niño que llora y nuestros sueños terminan cuando despierta en busca de teta.
Se supone que mis palabras deberían enamorarte y mis brazos arrullarte, en vez de eso te fastidian y oprimen.
Los años se van mientras la felicidad se añeja; los días pasan y la muerte se acerca.

Qué más dá si la semilla de vida queda...

1 comentario:

Venenito Teniza dijo...

PORQUE ESTOY MUERTO, VIVO. PORQUE ESTOY MUERTO, SIENTO. PORQUE NO VENDRÁS, TE ESPERO. PORQUE YA NO ESTÁS TE CANTO.


SABES QUE LA FELICIDAD PUEDE QUE SE AÑEJE,SIN EMBARGO SU VALOR AUMENTA....!!