CONTRA EL DESTINO

Cuando al final del día mi esfuerzo no redituó el éxito deseado, no puedo evitar sentir el fracaso y la decepción, pero no son estos sentimientos los que provocan mi depresión, sino el hecho de haberte fallado.

Sin embargo, son estos momentos lo que afloran el coraje de mi voluntad para alzar la cara para decir que te amo y enfrentar de nuevo a los retos de la vida, porque es tu amor y confianza los que me levantan, son tus caricias y besos los que me reaniman, son tu risa y sueños los que me inspiran…

Son tus lágrimas y suspiros que me indican que al final he muerto, no por dejarme vencer, sino porque desistí a aceptar el destino que me condenaba a lo ordinario, sin vivir el sueño de morir en tus brazos.

No, nunca seré esclavo de la rutina, si no amante de la aventura, de la incertidumbre, de tus besos que son mi alma…

Deprimido

Quisiera volar hasta allá donde tus sueños se extinguen entre el humo que escapa de tus dedos. Quisiera que tu recuerdo fuera mi recuerdo y que tus anhelos fueran hallarme muerto en el panteón de tus sentimientos...

Tan triste y fracasado espero sin ánimo tu regreso, deprimida y sumergida en el balde de la angustia; perdida en un tiempo de amargura.

Quisiera escribir poemas de amor, quisiera ahogarme con un vaso de tu sudor. Quisiera... quisiera olvidarte y correr hasta allá, al principio de la historia, donde alguna vez me amaste.